Las teribles faltas de ortografia

Un día, cuando salía del cole, fui a mi casa.Alli me senté en la mesa de mi cuarto a estudiar el mapa que nos había dado la de sociales.En frente de la mesa había una ventana en la que mi cara se reflejo.Tras un rato de estar mirándome me acorde de que tenia que terminar el mapa y seguí con el trabajo.
Al rato, termine de estudiar y me puse a pintarlo con diversos colorines.Al día siguiente, cuando fuimos a clase, la profesora de sociales nos dijo haber si habíamos hecho los mapas (claro, por supuesto le dijimos que si) entonces ella paso a recogerlos cuando termino la clase. La gente se paso el día entero pensando en los mapas.Yo me fui tan tranquila sabiendo que lo había hecho bien.Al día siguente la profesora los repartió y yo esperaba mi mapa con un diez pero no fue a si, tenia tantos millones de faltas que había sacado un 1,02.Me quede tan insatisfecha que desde aquel día ahora me pongo a hacer cuadernillos de ortografía a millones.Y esta preciosa yegua me llevó a razonar que tenia que fijarme mas en las faltas de ortografía.

P.D:Este cuento esta basado en hechos muy reales.